El día lunes, se hizo pública la carta que envío el Presidente Andrés Manuel al rey de España en donde le pedía se le diera una disculpa pública al pueblo mexicano por los agravios cometidos por los españoles durante el proceso de conquista, que en dos años cumple 500 años y se prevé se hagan diversas conmemoraciones por este motivo, a los cuales el propio presidente Andrés Manuel ha anunciado que no asistirá.

    Si bien, el choque cultural que se dio en 1521 forjo una nueva identidad, de la cual ahora los mexicanos somos partes, hay que recordar que fue una conquista sangrienta y llena de violencia en contra de los indígenas en una primera etapa; en otra etapa fue de saqueos y Zacatecas es parte de ello y bueno, aun lo sigue siendo, pero esa es otra historia…

    La petición de disculpa es un acto sin igual en la historia mexicana; ningún presidente se había atrevido a hablar de estos agravios y mucho menos exigirle al rey de España que se disculpara públicamente, no es algo nuevo entre los mandatarios del mundo, hay muchos ejemplos en los cuales otras naciones, que han cometido agravios en contra de otras han dado sus disculpas públicas, por citar algunos esta la disculpa que hizo Alemania a Israel por el holocausto o la misma España a la comunidad Sefardí por agravios en su contra. Otras también, siguen a la espera, por citar algunos son los países africanos que exigieron disculpas al presidente Trump que fueron denostados por él, o Canadá que pidió al papa Francisco disculparse por el abuso sexual de algunos misioneros a los indígenas de ese país.

    Las disculpas del rey de España, por las propias declaraciones de este, se vislumbra lejana y difícil, pero es parte de una reconciliación histórica y cultural que sanara algunas cicatrices de la conquista que siguen abiertas, aunque muchas personas de derecha lo vean como mofa, pareciendo muy sorprendentemente desconocer la historia de la conquista.

    En palabras del propio canciller Marcelo Ebrard, esta carta del presidente Andrés Manuel no pone en riesgo las relaciones bilaterales de México con el país europeo, ya que la petición se basa en la verdad y no busca conflicto, si no, encuentro.

    Pero en lo personal, no deja de sorprenderme como muchas personas que hoy se encuentran en la oposición política se espantan y piden “perdón” a España por esta misiva enviada, como si la sangre de nuestros antepasados no valiera mas allá de su posición política.

    Por lo pronto, el Presidente de la República ya ha declarado que creara una comisión para dar disculpas a los pueblos originarios de nuestro país que han sido agraviados por parte del gobierno. Sin duda, para lograr la pacificación de nuestro país debe existir primero la reconciliación.

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