Por Luis Medina Lizalde 

Durante muchos años se consideró que el PRI es el único partido que tiene “estructura nacional” , creencia que en mi opinión no resiste el menor análisis pues el PRI, al igual que sus antecesores PNR y PRM, nunca  tuvo la necesidad de contar con estructuras partidarias estables, permanentes y con quehacer cotidiano en cada sección electoral. 

Las estructuras en las que se apoyó el partido que mantuvo durante prolongado tiempo el control absoluto de municipios, estados y república fueron  estructuras de la administración pública mediante la cual se afianzó la subordinación corporativa de sindicatos, organizaciones agrarias y de clases medias,  en la misma lógica se inscribe el prolongado dominio en los medios de comunicación que hicieron de la cambiante visión del PRI la panacea, los convenios de publicidad  borraron de escena a la oposición y al sentir popular.

El Régimen de los tecnócratas, en vez de suprimir el nexo perverso del PRI con las finanzas públicas lo extendió a todos los partidos y a organizaciones sociales clientelares de modo tan radical que el régimen corrupto terminó financiando  hasta las marchas de “opositores” ahora sufriendo como peces fuera del agua y produjeron parvadas de políticos sin ideas ni convicciones duchos en el cambio de chaqueta.

 

NOS FALLÓ LA PRIMERA ALTERNANCIA Las elecciones presidenciales de 1988 marcaron el fin del ciclo del fraude en casilla, hubo necesidad de no dejar rastro de lo que contenían boletas y actas electorales mediante su destrucción pactada entre Salinas De Gortari y el equipo cupular del PAN liderado por Diego Fernández De Cevallos bajo el paternal aliento de un empresariado sin valores democráticos liderado por el más relevante de sus ideólogos,  Manuel Sánchez Navarro, en 2006 la consumación del fraude sería franca operación de estado mediante la negativa a contar voto por voto.

La oposición tuvo estructuras reales cuando no participaba o lo hacía testimonialmente en elecciones, el PCM implantó células en el territorio nacional cuya aportación al cambio aún no se aquilata, el PAN tuvo, además de su militancia orgánica esparcida a contrapartida del discurso revolucionario, al clero conservador que canalizó calladamente al PAN  el saldo emocional de la Cristíada.

La alternancia falló cuando el PAN primero y luego el PRD le dieron continuidad a la apuesta por las estructuras del servicio público confirmando la condición de fachada de las estructuras partidarias, por eso las victorias electorales  genuinamente democráticas, más que al PRI, doblegaron a la SEP, SEPLADER, DIF, y demás dependencias desde donde se han canalizado recursos públicos para ganar elecciones, la oposición traicionó los anhelos democráticos del pueblo mexicano, el Pacto “por México” fue un “fuera máscaras”

 

YA HUBO REVOLUCIÓN DE LAS CONCIENCIAS      

La victoria de López Obrador generó muchos cambios en la vida nacional, México ya es otro en más de un sentido pero vivimos  momentos de lucha entre lo nuevo que no nace y lo viejo que no muere. Morena cometería traición cediendo a la tentación de apoyarse en  estructuras públicas y prolongar la inexistencia de la frontera entre gobierno.

 Al seno de la #Cuarta Transformación hay visiones y prácticas contradictorias, mientras que el Presidente ciudadaniza su ejercicio de poder, hay   quienes reproducen prácticas contrariar al ideal democrático que tiene en Francisco I Madero su emblema, así lo indican las reiteradas denuncias de activismo electoral de algunos  servidores de la Nación en Zacateca. Es de justicia advertir que no todos se prestan pero temen que si se oponen abiertamente pierden su empleo. 

El uso de estructuras públicas y el condicionamiento burdo o sutil a beneficiarios  de programas sociales es prueba superada desde el momento en que los gobiernos del 2018 tuvieron menos votos entre todos que los que recibió López Obrador  y Morena en posiciones legislativas, sin contar con un solo gobierno que diera dádivas en su nombre.

  Sostenemos que la utilización  facciosa de servidores de la Nación, además de traicionar al Presidente,  debilita en vez de fortalecer a sus autores.

  El cambio profundo que  impulsa López Obrador busca prohibir  lucrar políticamente con la pobreza de los beneficiarios de programas  y con la necesidad de empleo de los trabajadores de los tres niveles de gobierno, ayudemos todos.

 

RESPALDAR CONGRUENTEMENTE AL PRESIDENTE 

 El cambio de Régimen será verdad con López Obrador,     su gestión ha sido valiente enfrentamiento con los impunes con poder, la violencia verbal de sus opositores es indicativa de una belicosidad  que raya en el golpismo.

 El cierre de filas  digno, informado y activo en torno al Presidente  es la principal garantía de que dejaremos atrás la corrupción, autoritarismo,  pobreza de muchos a cambio de riqueza de pocos Y violencia.

 Igual que siempre,  los que dicen una cosa y hacen otra  traicionan a todos  

Nos encontramos el jueves en Recreo 

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