Por: Luis Medina Lizalde

Hay un lado de la vida silenciado pero muy real, el de los que heredan deshonra y pagan las consecuencias sin deberla ni temerla, un estremecedor reportaje de la BBC de Londres da a conocer el repudio a sus padres siendo hijas e hijos de salvajes torturadores de la dictadura argentina que se enteraron de la cruel labor de sus respectivos padres hasta su vida adulta.

Hay un elemento común en todas las historias, los que despedazaban seres humanos en las salas de tortura, secuestraban y torturaban por órdenes superiores, eran en su hogar padres amorosos y responsables, repitiéndose la historia de los nazis perpetradores de horrores en los campos de concentración
Suele pasar que cuando se piensa en la situación en que se deja a los hijos cuando uno muere, la prevención solidaria gire alrededor de bienes y dinero y se ignore lo importante de la honra o deshonra que trasciende a los demás como consecuencia de los propios actos.


Inclusive, es normal que en los medios de comunicación se cuestione el nombramiento de una persona por su parentesco con quien no mantuvo sin mancha su nombre, por una razón u otra
La historia de desprestigio del oficio de policía inspiró la expresión coloquial de alguien que se sentía ignorado ¿Acaso soy hijo de cuico? Lo mismo sucede cuando se le adjudica el oficio de prostituta a la progenitora del odiado blanco de la expresión, se trata de expresiones verbales que en forma por demás elíptica reflejan que lo que el individuo hace en la vida trasciende a los suyos para bien o para mal, de eso nadie se salva, sea asesino o ambientalista, ladrón o filántropo, narco o policía honesto, rico o pobre. 


En el mundo de los políticos heredar a los hijos un buen nombre es facilitarles la vida, en contraste con los que sin culpa alguna heredan un apellido socialmente reprobado encontrando puertas cerradas por esa circunstancia.


DAÑADOS POR PARENTESCO

Le atribuyo al individualismo avaricioso la pérdida de rumbo de tanto político contemporáneo, inducido a buscar riqueza en cada cargo, parecen no percatarse de que el desprecio social que su actuación genera es extensiva a padres, hermanos e hijos muchas veces sin vela en el entierro, cuando el político es ostensiblemente nepotista, ese desprecio social se multiplica.

 
La preocupación del buen nombra para los hijos la tiene la prostituta que inscribe a sus hijos en colegios caros alejados de dónde desempeña su oficio. el político no puede hacer lo mismo en función de que su oficio es de una gran visibilidad, no hay modo de mantener a los hijos alejados del eco social de su apellido por más numerosos que sean sus lambiscones.

 
Además, cada gobernador en prisión, prófugo o en deshonra se ha llevado entre las patas a un grupo numeroso de ex-funcionarios, proveedores y contratistas que fueron notoriamente favorecidos. Sucede en Tamaulipas de Yarrington y en Tabasco de Granier, en Veracruz de Javier Duarte y en Chihuahua de Cesar Duarte, sucede en el entorno de los personajes nacionales defenestrados, con su caída arrastraron a muchos sin más razón que la de ser familiares, socios y allegados en general, tal es el potencial de daño de una conducta.


La magnitud de la corrupción de la que nos enteramos cada semana demuestra que vivimos una época en la que los políticos y asociados del sector privado que acumularon riqueza mal habida actuaron como los torturadores argentinos, sin pensar en la carga moral y sicológica que le trasladan a los hijos una vez que la dinámica de los pueblos le pone fin a su dominio.


Ahora resisten la revisión de sus cuentas, se oponen a lo que emana de un gobierno que la emprendió contra su corrupción y depositan sus expectativas en desgastar mediáticamente a la “Cuarta transformación” para poderla derrotar electoralmente.

 
COMO EN ARGENTINA…


En Aguascalientes sale a flote la presunta venta de terrenos fraudulenta que involucra a ls Nissan y al Gobierno de Carlos Lozano como para que no perdamos de vista que la descomposición pública reclama atención estado por estado, municipio por municipio.

 
En Zacatecas la corrupción socialmente sabida es institucionalmente tolerada. En nuestro estado, crecimos viendo que las grandes fortunas se gestaban en el ámbito privado mediante la ganadería, el comercio, la minería, la profesión exitosamente ejercida, la herencia familiar y de quizás hasta la lotería, ahora no es así, las fortunas se originan en la política
En lo local es más severo el desprestigio de un apellido porque la gente sabe de dónde surge cada fortuna nueva.


Como en Argentina, hay hijos que no se sentirán orgullosos de sus padres
….. al menos que sean iguales

Nos encontramos el viernes en Recreo
luismedinalizalde@gmail.com @luismedinalizalde